Etapa
De acuerdo con el portal etimologias.dechile.net
la palabra etapa tiene el siguiente origen:
El castellano acogió la palabra francesa 'étape' [leer : etap], presente desde el siglo XIII con la forma 'estople' y que correspondió primero a 'factoría', 'depósito' y más tarde (1540) a 'almacén para las tropas de paso' para designar por extensión los lugares donde las tropas se detienen. La palabra de origen es neerlandesa: 'stapel' (depósito, almacén). (https://etimologias.dechile.net/?etapa).
El origen es francés, luego fue
adoptado por el castellano, siendo los significados “factoría”,
“depósito”, después evolucionó, para designar al lugar donde
descanso. Se aclara que esta palabra se extendió a diferentes contextos, por
ejemplo, es comprendido también como momento en el que concluye una acción o un
ciclo.
Fase
Otra de las acepciones muy empleada en las ciencias sociales y humanas en cuanto a fase, es explicada de la siguiente manera:
La palabra fase es un cultismo que es la traslación y adaptación al francés en el s. XVI del vocablo griego clásico φάσις ("phasis", acción de mostrarse, manifestación, aparición de un astro o estrella o etapa en que se la puede ver), nombre de acción con sufijo -sis (acción), a partir de la raíz del verbo griego φανεῖν ("phaneín", mostrarse, hacer aparecer, hacer brillar), cuya raíz encontramos en palabras como fantasma, fantasía, fanerógama, fenómeno, sicofante, diáfano, afaníptero, quirófano, etc. Con la palabra fase formamos también compuestos técnicos con raíces griegas, como profase, anafase y telofase.
El vocablo se tomó en francés del griego primeramente para referirse a las fases de la luna, aplicándose después a nuevos valores, y desde el francés pasó a todas las lenguas.
El verbo griego φανεῖν contiene una raíz indoeuropea *bhā-1(brillar, resplandecer), que también dio lugar en griego al vocablo φῶς, φωτός (luz), que genera palabras como fotografía, fósforo y fotogenia. (https://etimologias.dechile.net/?fase).
La fuente, hace entender que fase
es el estado distintivo de un acontecimiento procesual o serie de cambios
diferenciados.
Así también, se comprende como el
estado por el que pasa una cosa o fenómeno, en el que ocurre un cambio, se
desarrolla o evoluciona.
Proceso
Respecto
a proceso, en la revisión de la raíz, puede decirse que:
La palabra proceso viene del latín processus (avance, marcha, desarrollo), nombre de resultado a partir del supino processum, que también genera el participio (processus), del verbo procedere (marchar hacia adelante, avanzar). De procedere vienen también procesión y procedencia. El sentido de "provenir" del verbo proceder lo adquiere como desarrollo del significado de haber avanzado a partir de algo. Procedere se compone de pro- (hacia adelante) y el verbo latino cedere (andar, marchar, caminar, retirarse, ceder). Como cedere tiene una raíz de supino cess- que es la que genera su participio de perfecto, en los derivados de este verbo encontramos la raíz tanto con la forma ced- como con la forma ces-. Así tenemos multitud de palabras con la raíz de este verbo latino, como ceder y cesión, acceder y acceso, conceder y concesión, exceder y exceso, deceso, interceder e intercesión, proceder y proceso, receso, secesión, etc. También el verbo latino cessare es un derivado de cedere, y de él tenemos cesar y cejar.
Se suele asociar el verbo cedere a una raíz indoeuropea *ked- (ceder, retirarse, marchar), que también dio en latín el adverbio y adjetivo indeclinable necesse (con prefijo ne-, aquello de lo que uno no puede apartarse, necesario, inevitable), de donde proceden necesidad y necesario (del latín necessarius, referido en principio a los familiares y parientes, con los que se tiene un vínculo del que no nos podemos apartar). (https://etimologias.dechile.net/?proceso).
Recuperando la etimología, proceso es en síntesis marchar hacia adelante o avanzar.
De acuerdo a un uso más contemporáneo —sin dejar de lado el significado etimológico—, se entiende como conjunto de fases sucesivas de un fenómeno o hecho complejo.